En primer lugar y antes de tomar cualquier decisión debemos conocer las diferencias entre las dos opciones.
La primera diferencia es la flexibilidad en cuanto al tiempo para entrar en la propiedad con una donación y con una herencia. La donación se transmite de inmediato tras la firma y es mucho más flexible a la hora de hacer reparto de bienes entre los familiares. La herencia únicamente entra en vigor tras el fallecimiento de la persona que hace el testamento.
Las dos opciones están sujetas al Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. Este impuesto está cedido a las comunidades autónomas que regulan las exenciones y las bonificaciones así que, para poder decidir se deberá conocer la regulación específica de la comunidad autónoma en la que se resida.
Asimismo, el coste de la herencia depende del grado de parentesco, de la edad de los herederos y de la ciudad en la que residan, entre otras.
La tributación por donación también depende de la comunidad en la que resida el donatario.
Y ahora viene lo más significativo. ¡el IRPF!
La donación tiene una gran desventaja fiscal frente la herencia, ya que se declara como ganancia patrimonial en el IRPF del donante. Los únicos casos en los que los receptores de una donación se pueden beneficiar de ventajas fiscales serían en caso de recibir la donación bajo el cumplimiento de determinados requisitos. Estas bonificaciones fiscales se consideran únicamente si el grado de parentesco entre donatarios sea, como mínimo, de descendientes, ascendientes, o de cónyuge del donante. Además, las donaciones pueden estar sujetas a condiciones cuyo incumplimiento puede imponerse. En caso de no cumplirse las condiciones impuestas, o si se probara que ha habido un maltrato físico o psicológico por parte del receptor, la donación podría revocarse.
La diferencia entre la herencia y la donación frente a los pagos de impuestos puede llevar a pensar que es mejor elegir heredar, ya que resulta más barato. Sin embargo, si se elige la opción de donar la propiedad, esto da una seguridad a los herederos, ya que conocen cuál será su parte específica de la herencia, lo que evitará los malos momentos acompañados a la hora de repartirla. En CasaSoles os acompañaremos en este proceso decisivo ofreciendo asesoramiento adecuado para cada caso.
